Wednesday, June 18, 2014
Según uno de los abogados de Meriam Ibrahim, las autoridades penitenciarias de Sudán, le tuvieron que quitar, por orden médica, las cadenas que llevaba puestas. Esta mujer ha sido condenada a muerte por negarse a renunciar de su fe cristiana.
"Le retiraron las cadenas después de que diera a luz a una niña en prisión", anunció uno de sus abogados, Mohanad Mustafa.
Se trata de una "orden médica", precisó el letrado.
Ibrahim fue sentenciada a muerte el mes pasado por cargos de apostasía por supuestamente haberse convertido al cristianismo desde el islam. Ella niega esa acusación, diciendo que fue criada como cristiana por su madre etíope.
"Nunca fui musulmana", dijo. "Fui criada en el cristianismo desde el principio", disputó.
El tribunal dio a la madre cristiana una oportunidad para retractarse de su fe cristiana, pero Ibrahim se negó a hacerlo, según informes, diciendo al tribunal: "Yo soy cristiana, y voy a seguir siendo una cristiana".
La corte, también ordenó que Ibrahim recibiera 100 latigazos por haber cometido "zena"- en árabe, "sexo ilegítimo" - por tener relaciones sexuales con su marido, Daniel Wani, un cristiano del sur de Sudán, que tiene la ciudadanía de Estados Unidos.
Al igual que en muchas naciones musulmanas, las mujeres musulmanas en Sudán se les prohíbe casarse con no musulmanes, mientras que los hombres musulmanes pueden casarse fuera de su fe.
Por otra parte, esta mujer dio a luz a su segundo hijo en la prisión donde está siendo retenida. Su primer hijo también está encarcelado con ella.
Indignación internacional
Los presidentes de las instituciones de la Unión Europea (UE), así como los representantes de las principales religiones en Europa, hicieron el martes un llamado para la liberación de esta mujer, informa AFP.
Según esa agencia de noticias, los legisladores de la Comisión, del Consejo y del Parlamento Europeo, respectivamente, exhortaron a las autoridades sudanesas a respetar la libertad de religión y a revocar el "veredicto inhumano" pronunciado contra Ibrahim y a liberarla.
Además, recientemente manifestantes de unos 40 grupos marcharon y se reunieron frente a la Casa Blanca, en Estados Unidos, con el propósito de acusar al presidente Barack Obama, de no hacer lo suficiente para exigir a Sudán la liberación de la mujer.
Algunos de los manifestantes que pidieron su libertad, llevaban lazos rojos en forma de cadenas, mientras marchaban y se manifestaban.
"Estos representan las cadenas que Meriam Ibrahim ha estado usando desde que fue encarcelada en Sudán," dijo en ese momento a CBN News, Penny Nance, de Concerned Women for America.
"Ella en realidad se vio obligada a dar a luz, mientras usaba las cadenas. Así que quería usarlos en solidaridad con nuestra hermana en Cristo, que fue encarcelada sólo por su fe", agregó.
Asimismo, otras instituciones a nivel internacional, como la Alianza Evangélica de Italia, Asamblea Legislativa de Costa Rica; han hecho su llamado al gobierno sudanés para que libere a Ibrahim.
Tras el nacimiento de su hija, Ibrahim fue transferida de la celda que compartía con otras mujeres a la clínica de la prisión, indicó su abogado.
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